El Gobierno Militar de Malí Pospone las Elecciones Presidenciales Destinadas a Restaurar el Gobierno Civil

Las elecciones presidenciales programadas para febrero de 2024 se están retrasando por "razones técnicas" para permitir que el gobierno de transición revise sus datos electorales y aborde una nueva disposición constitucional que retrasaría la segunda vuelta de la votación, dijo el portavoz del gobierno Abdoulaye Maiga a los periodistas en Bamako, la capital.

"El gobierno de transición especifica que las nuevas fechas para las elecciones presidenciales se comunicarán en una fecha posterior, luego de las conversaciones con la Autoridad Independiente de Gestión Electoral (AIGE)", dijo Maiga.

Es la segunda vez que el gobierno militar de Malí, que surgió de dos golpes de Estado en 2020, pospone las elecciones presidenciales del país.

Los políticos en Malí criticaron la decisión, que podría generar sanciones económicas del bloque regional de África occidental, la CEDEAO. El bloque suavizó las sanciones a Malí en julio de 2022 después de que el gobierno prometiera celebrar las elecciones.

"Nada explica el aplazamiento de las elecciones presidenciales", dijo Amadou Koita, presidente del Partido Socialista Yeleen-Kura de Malí.

Malí está lidiando con ataques de grupos armados vinculados a Al Qaeda, el grupo Estado Islámico y ex rebeldes cuyo acuerdo de paz de un año con el gobierno fracasó en las últimas semanas.

Una ola de golpes de Estado en la región africana del Sahel comenzó en Malí en agosto de 2020, cuando los soldados dirigidos por el Coronel Assimi Goita derrocaron al presidente elegido democráticamente, Ibrahim Boubacar Keïta. El ejército dijo que restauraría el gobierno civil en un plazo de 18 meses.

Sin embargo, siete meses después del proceso de transición, los líderes militares destituyeron al presidente interino y al primer ministro que habían designado y juramentaron a Goita como presidente del gobierno de transición.

Los votantes malienses votaron en un referéndum de junio sobre un nuevo proyecto de constitución que, según el régimen, allanaría el camino para las elecciones.